El lehendakari, Iñigo Urkullu, se ha mostrado convencido de que Euskadi remontará la crisis con el 'pacto de país' alcanzado entre el PNV y el PSE-EE, y ha afirmado que se abre "una etapa del diálogo" en Euskadi. Urkullu, PNV y PSE han dejado abierto el acuerdo al resto de partidos, aunque han asegurado que no "desnaturalizarán" sus contenidos.

   Urkullu, junto al presidente del EBB del PNV, Andoni Ortuzar, y el líder del PSE-EE, Patxi López, ha comparecido este lunes en una rueda de prensa en la sede de la Presidencia del Gobierno vasco, en Vitoria, tras la firma del 'pacto de país' entre jeltzales y socialistas sobre fiscalidad, reactivación económica y otras materias.

   El acuerdo tiene, entre sus principales contenidos, una propuesta de reforma tributaria que plantea un incremento de la presión para las rentas altas --eleva el tipo máximo del IRPF al 49 por ciento-- y para determinadas empresas, dado que se limita el alcance de las deducciones por el Impuesto de Sociedades.

   La aprobación de estas reformas fiscales dependen, en última instancia, de las Juntas Generales de cada territorio histórico. Por ello, la aprobación de las medidas tributarias consensuadas por ambas formaciones solo está garantizada en Bizkaia, donde PNV y PSE suman mayoría absoluta, mientras que en Gipuzkoa y Álava depende de la actitud que adopten EH Bildu y el PP.

   Tanto el lehendakari como los líderes del PNV y el PSE han resaltado el carácter "abierto" del documento que han suscrito. No obstante, Ortuzar ha advertido de que el acuerdo no puede "desnaturalizarse", mientras que López ha acotado el entendimiento al que pueda llegarse con otros partidos a que estos "compartan los objetivos" recogidos en el texto acordado con los jeltzales.

   López, en referencia a un posible rechazo a la reforma fiscal en Álava o Gipuzkoa, ha recordado que siempre puede recurrirse a la vía de la "armonización", una potestad que tiene reconocido el Parlamento vasco para corregir posibles desequilibrios en la normativa fiscal de unos y otros territorios.

   En su intervención, Urkullu ha subrayado que, con el acuerdo presentado este lunes, pueda abrirse "un nuevo tiempo para tejer complicidades, de entendimiento y de concertación", y ha mostrado su deseo de que, ante las "dificultades" económicas que se prevé que continúen en los próximos meses, el consenso pueda "extenderse" al resto de partidos e instituciones.

   Urkullu ha rechazado que el pacto con el PSE-EE suponga "el verdadero inicio de la legislatura". "Hoy no se cierra un acuerdo, hoy se abre un acuerdo. Nos une la convicción de abrir una etapa política de diálogo, debate, de entendimiento y concertación. Constatamos, compartimos y convenimos que es necesaria una nueva cultura de acuerdo", ha apuntado.

   Tras señalar que el Gobierno vasco ha decidido "compartir" sus decisiones, ha dicho que socialistas y jeltzales "hoy alcanzan un gran acuerdo de país", lo que supone "un paso para un presente y futuro esperanzador". "Valoro este acuerdo desde una perspectiva histórica", ha aseverado.

   Iñigo Urkullu cree que, después de los últimos 15 años en Euskadi en los que "han primado el enfrentamiento y la confrontación", este acuerdo "puede y quiere abrir un nuevo tiempo" en el que se "tejan complicidades" para "crecer desde la pluralidad, el trabajo común y el acuerdo". "Este acuerdo abre un nuevo periodo de posibilidad de entendimiento y de concertación", ha añadido.

   El lehendakari, que ha subrayado "el trabajo técnico de alto nivel que fundamenta el acuerdo", ha afirmado que han "propiciado, participado y comprometido" el pacto porque "creen" en él. En este sentido, ha asegurado que PNV y PSE-EE, así como el Gobierno vasco, serán "muy exigentes" en su cumplimiento.

   Para el presidente del Ejecutivo vasco, este acuerdo "es una mirada al futuro con confianza" porque Euskadi "necesita construir, crear, fabricar y avanzar". "Nuestro mensaje es de confianza. Desde el acuerdo, vamos a remontar esta crisis", ha aseverado.

   Tras insistir en que el pacto está y seguirá "abierto" a otras formaciones, ha señalado que su pretensión es extender este consenso a otras formaciones y a todas las instituciones públicas.  

   Andoni Ortuzar ha indicado que éste "es un gran día para el conjunto del pueblo vasco" porque este acuerdo "consolida y refuerza el modelo social vasco, el conocido 'modelo Euskadi'. "Además, nos va a permitir centrar todo nuestro esfuerzo en el estímulo de la economía y la creación de empleo", ha añadido.

   En este sentido, ha destacado "la bondad" de las medidas que recoge este pacto y ha subrayado que "es mejor aún porque es hijo del diálogo", ya que Euskadi "no está para riñas partidistas, sino para que se salga de la crisis".

   A su juicio, "el pacto es el camino más corto entre dos o más visiones diferentes", y por ello, ha considerado que "es aplicable a todas la materias, la economía, la sanidad, los servicios socialistas y también a la pacificación y la convivencia". "Dialoguemos, pactemos todos juntos. Este pacto está abierto a todos", ha apuntado.

   Andoni Ortuzar ha dicho que "éste es un primer pacto y Euskadi avanza con él", aunque ha considerado que "el camino todavía será largo". De esta forma, cree que este pacto "amplio, de entidad y profundidad" aportará, entre otras cosas, "certidumbre fiscal" y contribuirá a generar empleo y reactivar la economía.

   Tras asegurar que "las puertas están abiertas" a otros partidos, ha añadido que, "cuantos más seamos, mayor será el impulso que podamos dar a la sociedad vasca en la senda de la recuperación económica".

   "2013 ha sido el año más duro de la crisis. El Gobierno vasco lo ha tenido que recorrer en solitario y 2014 nos muestra un mejor horizonte y vamos a poder recorrerlo en compañía de este gran acuerdo", ha señalado.

   También ha precisado de que el entendimiento alcanzado con los socialistas en materia de organización interna de la comunidad autónoma, en cuanto a posibles cambios de la arquitectura institucional, pueden facilitar eventuales acuerdos sobre una eventual reforma del estatus jurídico político de Euskadi. Este debate se abordará próximamente en el seno de la ponencia sobre autogobierno que se constituirá en el Parlamento vasco.

   El secretario general del PSE-EE ha destacado también la relevancia del acuerdo, pero ha insistido en que no supone "un cheque en blanco" para Urkullu ni "un pacto de legislatura para todo".

   Además, ha explicado que "no es un compromiso forzado por las circunstancias", sino "sustentado en convicciones profundas" y "en el reconocimiento de que Euskadi tiene un ser plural". También asume la filosofía de que son "la política y las instituciones públicas" las obligadas a dar soluciones "realistas".

   Según ha añadido, el PSE cree que, "se esté en el Gobierno o en la oposición, su obligación es ésa", y ha ofrecido y exigido "lealtad en el acuerdo".

   Patxi López ha defendido el "valor político y social enorme" del pacto porque permite "dar utilidad a la política y ponerla al servicio de la sociedad". "Y demuestra también que el PSE es un partido que sabe decir no cuando hay que decir que no, y sí, cuando hay que defender los intereses de la ciudadanía", ha dicho.

   También ha coincidido con el PNV y el lehendakari en que el acuerdo incluye medidas "que ayudarán a Euskadi a enfrentarse mejor a la crisis" y a hacer que 2013 sea "el último año negro".

   Por último, ha indicado que, aunque firmado por dos partidos, el acuerdo tiene vocación de ser "compartido" con otros grupos, por lo que ha garantizado que los socialistas trabajarán "para que otros se puedan sumar".